“El gobierno utiliza el disfraz de la propiedad social para ser dueño de todo”

“La producción nacional y la generación de empleos sólo se harán efectivas si el gobierno nacional las promueve, en vez de atacarlas y amenazar a la iniciativa privada con expropiaciones sin sentido que sólo espantan a quienes aún pudieran tener intención de invertir en Venezuela, pues el gobierno está utilizando el disfraz de la propiedad social para ser dueño de todo“, indicó Julio Borges coordinador nacional de Primero Justicia.

La reflexión la hizo este domingo el coordinador nacional de Primero Justicia, durante una rueda de prensa en la cual puntualizó que “el gobierno tiene una obsesión desmedida por controlarlo todo”.

¿Cuál es la verdad de lo que está pasando en Venezuela?, se preguntó. “Pues que el gobierno continúa con la obsesión egoísta de querer ser dueño de todo, de controlarlo todo”, respondió.

“El señaló que todo tenía que convertirse en propiedad social, como si eso se tradujera en propiedad para el pueblo, pero está muy claro el objetivo: que el dueño absoluto sea el gobierno”, indicó Borges.

El dirigente de la tolda amarilla se preguntó a quién pretenden engañar con la versión de que las expropiaciones son para darle la propiedad al pueblo. “La respuesta es sencilla. Los venezolanos saben que las 120 empresas expropiadas hasta ahora han terminado exclusivamente en manos del gobierno”.

Casos emblemáticos

Borges quiso sacar a colación algunos casos emblemáticos que sustentan sus señalamientos.

• La fábrica de válvulas Inveval. “Fue expropiada en 2003 a solicitud de sus trabajadores. El gobierno les prometió que serían dueños de 49% de las acciones y hoy el Estado posee el 100%”.

• La productora de papel Invepal (antes Venepal). “Expropiada en 2005, con la promesa de un modelo cogestionario. Cinco años después, el gobierno adquirió las acciones a la cooperativa y ahora es dueño del 83% de la empresa”.

• Cantv y la Electricidad de Caracas. “Estatizadas en 2007. Miles de venezolanos que eran accionistas de estas empresas y recibían sus dividendos, finalmente tuvieron que venderle su propiedad al gobierno”.

• Sidor. “Expropiada en 2008. 15 mil familias propietarias del 20% de la siderúrgica bajo la figura de accionistas clase B, continúan hoy en el limbo sin saber qué pasará con su propiedad”.

Producción y empleo palo abajo

“Pero es que el desempeño de las empresas expropiadas ha empeorado significativamente. Por ejemplo tomemos el caso más antiguo: Inveval. Desde que fue estatizada en 2003 hasta 2007, la empresa redujo su producción en 60% y ahora está prácticamente paralizada”, señaló Borges.

Analizando algunos acontecimientos recientes, Borges explicó que todas estas intervenciones se traducen en “deterioro de los empleos y en deudas con los proveedores”, destacando los siguientes casos:

• La cooperativa textilera Invetex. “Tiene cinco años sin producir y de los 300 cooperativistas que la iniciaron sólo quedan poco más de 100″.

• La procesadora de arroz Cargill. “Expropiada hace un año, supuestamente por no producir arroz regulado. Desde entonces ha mermado su producción en 50% y los trabajadores han sufrido hasta un 50% de recorte en sus sueldos”.

• La empresa Láctea Socialista. “Desde hace cinco semanas no les paga a los ganaderos que la abastecen”.

“Cómo se justifican estas expropiaciones”, se preguntó nuevamente Borges. “La realidad es que son historias de fracasos y engaños que sólo se explican por la actitud egoísta de un Presidente obsesionado por ser dueño de todo”.

El dirigente de Primero Justicia, mostró los datos recientes de Consultores 21 que señalan lo siguiente:

• 73% de los venezolanos piensa que sólo con empresas privadas se consiguen las marcas que le gustan.

• 70% considera que la propiedad privada garantiza variedad y calidad de los productos.

• 60% opina que con la empresa privada se genera más bienestar y empleo digno.

Propuestas

“Por eso, hoy reiteramos las propuestas en el marco de nuestra bandera Propiedad para Todos, las cuales incluyen la promoción intensiva de la iniciativa privada (que logre capitalizar ese 50% de trabajadores que está en la economía informal), la creación de miles de empresas, el aumento de la producción nacional y el incremento de la oferta para que todos podamos comprar a mejores precios“, sugirió.

También planteó la posibilidad de que todos los venezolanos, a través de un amplio mercado de capitales, puedan ser socios de las empresas públicas o privadas. “La idea es que cualquiera pueda ser accionista de empresas nacionales y reciba sus dividendos o estos puedan formar parte de fondos de seguridad social”, explicó el coordinador nacional de la tolda amarilla.



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