El dirigente de Primero Justicia, Julio Borges, considera que el secretario general de la OEA, José Miguel Insulza, no debe pronunciarse sólo a título personal sobre la expulsión del director para las Américas de Human Rights Watch, José Miguel Vivanco. Además, considera que la decisión del gobierno obedece a una estrategia para desviar la atención de las elecciones regionales.
“Si hay un tema que es universal, que no tiene fronteras, donde no existe la soberanía nacional, son los DDHH”, dijo Borges en respuesta al discurso de Insulza sobre la expulsión de Vivanco.
Recordó a los venezolanos que faltan ocho semanas para las elecciones regionales y pidió que no desvíen la atención sobre los problemas del país, pues a su juicio, esto es lo que busca el gobierno con sus acciones y su discurso de las últimas semanas.
Borges exhortó a los gremios, medios, vecinos y políticos a exigirle cuentas al presidente Chávez sobre su gestión, en especial en materia de vivienda. “En estos 10 años de gobierno, solamente se han construido 200 mil viviendas. Si el gobierno hubiera creado las condiciones de financiamiento, en estos 10 años no debería haber déficit de viviendas”, afirmó.
Sobre la unidad de la oposición para las candidaturas unitarias, informó que en dos semanas lograrán acuerdos en Bolívar y Táchira con las primarias, y también en los municipios Chacao y Libertador.
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20 septiembre 2008
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