Venezuela conmemoró este miércoles el 50 aniversario del derrocamiento de la dictadura del general Marcos Pérez Jiménez (1948-58), con actos que por primera vez organiza el gobierno de Hugo Chávez, mientras la oposición firmó un pacto de unidad y marchó por Caracas.
La Asamblea Nacional realizó una sesión solemne en el Cuartel San Carlos de Caracas, y el alcalde Mayor de Caracas, Juan Barreto, encabezó un acto en el que llamó a reforzar el proceso político que lidera Chávez, en el poder desde hace nueve años.
"Mientras la oposición se ve unida, nosotros nos vemos dispersos, mientras la oposición presenta nuevos rostros, los nuestros se van viendo cansados. Es por ello que debemos promover nuevos revolucionarios que pueden ser parte del movimiento porque tenemos el compromiso con todos los aquellos que cayeron en esta lucha", dijo Barreto.
En línea con la autocrítica que impulsa Chávez a partir de la derrota de su propuesta de reforma constitucional en el referendo del 2 de diciembre pasado denominado "revisión, rectificación y reimpulso", Barreto dijo que "un proceso que no avanza tiende a morir, a desaparecer".
"Comenzamos a ver algunos síntomas que pudieran evidenciar ciertas formas de estancamiento. Pero estamos a tiempo para poner el corazón en la necesidades del pueblo, apostamos por la diversidad democrática y llevar el proceso socialista al desarrollo", dijo el alcalde chavista.
Por su parte, las principales organizaciones políticas de la oposición suscribieron acuerdo de unidad nacional con miras a las elecciones a gobernaciones, alcaldías y concejos municipales, hacia el último trimestre del año, y realizaron una marcha de varios miles por las calles de Caracas.
Con una convocatoria a otras organizaciones políticas y sociales el documento fue suscrito por los ex gobernantes Acción Democrática (socialdemócrata) y Copei (socialcristianos), el Movimiento al Socialismo (izquierda), Un Nuevo Tiempo (socialdemócrata), y Primero Justicia (centroderecha), entre otros.
Carlos Ocariz, líder de Primero Justicia, expresó que el objetivo no es unificar los partidos: "Cada partido tiene su ideología, sus diferencias". El acuerdo político busca "apoyar a los mejores (candidatos), aunque no pertenezcan a ninguno de los partidos que estamos aquí".
Más de un millar de académicos e intelectuales firmaron por su parte un documento en el que recuerdan que el 15 de enero de 1958 los principales intelectuales de la época se manifestaron por "la libertad democrática y una armoniosa relación entre los poderes del Estado y de la ciudadanía".
"Cincuenta años después, Venezuela vuelve a estar dividida, los inmensos recursos del Estado son manejados a discreción, sin rendimiento de cuentas. Cada vez más dependemos de la renta petrolera", indicaron.
"La inseguridad nos convierte en rehenes del delito. Nuestras relaciones internacionales se definen a través del conflicto, con alianzas inconvenientes e inconfesables", señala el manifiesto que critica además el desabastecimiento, la inflación y "intolerancia y la discriminación de la justicia".
El 23 de enero de 1958, un movimiento cívico militar obligó a Pérez Jiménez, quien había tomado el poder en 1948, a abandonar el país. A bordo de un avión, el dictador huyó a República Dominicana, desde donde luego se trasladó a Estados Unidos.
Pérez Jiménez residió durante décadas en España, donde murió en 2001, a los 87 años de edad.
Hasta hoy Chávez había dejado pasar la fecha sin actos conmemorativos y al inicio de su gobierno proclamó que los venezolanos no "tienen nada que celebrar el 23 de enero", pues la fecha marca el inicio de cuatro décadas de democracia bipartidista "corrupta" contra la cual se alzó con un fallido golpe en 1992.
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