Los activistas advirtieron que cualquier manifestación pública será posible siempre y cuando no se afecte el desarrollo del evento deportivo.
Los justicieros rechazaron que haya ciudadanos “de primera y de segunda” Dirigentes regionales de Primero Justicia refutaron las acusaciones oficialistas sobre supuestos planes de sabotaje contra la Copa América, respondiendo con una denuncia sobre la confiscación de las entradas al encuentro futbolístico por parte del gobierno, para evitar manifestaciones de rechazo a funcionarios y mandatarios.
Wilson Castro, coordinador general de la tolda aurigris en el estado Bolívar, rechazó completamente la supuesta conspiración anunciada por el ministro de Interior y Justicia, Pedro Carreño, para sabotear la realización de la Copa América 2007.
“Desde el estado Bolívar rechazamos toda actividad que entorpezca la Copa América, porque ese evento es de los venezolanos y queremos dar lo mejor de nosotros. Pero también queremos hacer algunas observaciones, porque no comprendemos cómo se han gastado más de 1.200 millones de dólares mientras tenemos un país sumergido en la pobreza”.
Dijo que a quienes visiten Guayana no se les hará muy difícil descubrir esta realidad, pues precisamente alrededor de una obra de 120 millones de dólares, se presentan los más graves problemas de inseguridad y venta de drogas del municipio Caroní.
Pero lo más grave fueron sus denuncias sobre el carácter “gobiernero” del evento futbolístico, pues estarían siendo excluidos de la boletería muchos fanáticos, para garantizar el acceso de funcionarios públicos y evitar así, alguna manifestación de rechazo en contra del oficialismo.
Con pruebas en la mano, Wilson Castro lamentó que los miles de fanáticos que llenaban el estadio Cachamay para presenciar los encuentros de Mineros de Guayana, no tengan acceso a la Copa América, cuyo acceso sólo está “siendo obsequiado a la gente del Seniat y de la Gobernación del estado Bolívar”.
“Nosotros nos preguntamos por qué siguen existiendo venezolanos de segunda y de primera. Nos parece bien como política institucional que para incentivar a sus empleados, pero por qué no le entregan a la gente humilde, a la gente pobre, a la gente que no tiene cómo pagar una entrada”.
“Será que quieren que esto se convierta en una masa roja rojita para que no chuleen a los mandatarios regionales, al mandatario nacional o a los diferentes ministros y personalidades que van a estar en ese evento”, se preguntó el dirigente político.
Además, sobre la prohibición de protestas mientras se celebre el encuentro futbolístico, Castro advirtió que la medida sólo aplica para las áreas de seguridad en los alrededores de los estadios, para garantizar el normal desenvolvimiento de los eventos.
“Pero más allá de esos perímetros sí podemos hacer actividades. Por eso convocamos a la población para que respalde las iniciativas que se adelantan para el Día del Periodista, que deben hacerse en el marco de la ley”.
Finalmente, fue claro al sentenciar que a pesar de la reacción del oficialismo contra la campaña que adelantan por el tema de la inseguridad, continuarán entregando volantes e informando a la comunidad y al mundo sobre el avance desmedido del hampa y la incapacidad del gobierno para frenar la situación.
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